con la que es “enriquecida desde el primer momento de su concepción” (Lumen gentium 56) le viene enteramente de Cristo: es “redimida de manera eminente en consideración a los méritos de su Hijo” (LG 53).
cuánto entraba este acto en los Designios de Dios para ella. Las noches siguen transcurriendo casi enteramente llenas de estos tormentos y Josefa escribe dolorosamente, el 5 de noviembre: « He visto caer almas
nte femenina, porque la santidad es específicamente una cuestión de esposa y de nupcias. Está enteramente contenida en el "aquí estoy", íntimo, total, definitivo, a Dios. Dios no es conocido —en el sentido
doctor de la Iglesia (†749), proclamó: “Venid todos: ¡celebremos con alegría la alegría del mundo entero! Hoy, de la naturaleza terrenal, se ha formado un Cielo en la tierra. ¡Hoy es el comienzo de la salvación
extremadamente importante. Deben ser, queridos amigos, portadores de la Buena Nueva; decirle al mundo entero que, aquí, en Medjugorie reencontramos la luz. Porque necesitamos rayos fuertes de luz en este mundo
culto autorizado. María, la que nunca se vio a sí misma (I) Antes de la Anunciación, María ya era enteramente de Dios. Se ofrece, se entrega, acoge la pobreza, espera. Pero todavía no sabe con qué plenitud
noviembre de 1922, Marta fue herida de amor frente al altar de la Virgen María (...). Es la vida entera de Marta, sus actividades diarias en la granja, la que se ve impregnada de la gracia mariana”. Y
sintió la necesidad de volver a la práctica de la Iglesia Romana y de todos aquellos en el mundo entero que celebran el 25 de marzo como el día sagrado por antonomasia de la Anunciación de la Santa Virgen
segunda bomba atómica. En tiempos del padre PetitJean, Urakami y su catedral no fue destruida enteramente por la bomba. Encyclopédie Maria, tome IV – Beauchesne 1956 – p.27
celestes, y la enriquece con una profusión maravillosa a fin de que ella sea para siempre sin mancha, enteramente exenta de la esclavitud del pecado, toda bella, toda perfecta y con una tal plenitud de inocencia