Monseñor Pierre-Antoine Bozo, obispo de Limoges (Francia), presidió un acto de consagración de los dos dicasterios de su diócesis al Corazón de Jesús y de María, el 8 de diciembre de 2023, en la catedral de Saint-Étienne de Limoges. Este acontecimiento estuvo marcado por la instalación en la catedral de una placa de porcelana realizada por la fábrica Real Limoges, perpetuando así la memoria de este importante momento espiritual.
Esta consagración a los Corazones Unidos de Jesús y María encuentra su fundamento en una rica tradición espiritual, que se remonta al siglo XVII con los apóstoles del Corazón de Jesús y María, san Juan Eudes y santa Margarita María. Mons. Bozo explica: “Desde que soy obispo de Limoges, en varias ocasiones me han pedido que consagre nuestra diócesis. Estas peticiones eran eco de una intuición presente en mí desde el inicio de mi episcopado: anclarnos —como echando un ancla— más radicalmente en este “horno de amor”, como decía san Juan Eudes, que es el Corazón de Jesús unido al de María. Cuanto más contrarios sean los vientos, más debemos estar anclados a la Fuente de Vida”.
Para esta consagración se eligió la fecha simbólica del 8 de diciembre, solemnidad de la Inmaculada Concepción. Esta ceremonia no es una Misa normal, sino más bien una oportunidad para cantar Salmos, escuchar la Palabra de Dios y los textos de la Tradición, preparando así a la asamblea para el acto solemne de consagración de la diócesis.
¿Qué frutos se esperan de esta consagración? Que los fieles se sientan “encendidos aún más por este «horno de amor»”. Y que este acto espiritual fortalezca el compromiso de los creyentes como discípulos misioneros de Jesucristo. Todos están invitados a unirse a esta consagración, ya sea en la catedral o desde casa, ratificando personalmente este compromiso.