Desde diciembre de 1993, miles de fieles de la región de San Francisco (Estados Unidos), de todo California y de otros estados vecinos, participan en una peregrinación que pasa por las ciudades de South San Francisco, Colma, Daly City y San Francisco. La peregrinación es en honor de Nuestra Señora de Guadalupe.
En 2020, a pesar de que la "Cruzada Guadalupana de San Francisco" se desarrolló virtualmente, Francisco Hernández, de 55 años, que padecía cáncer de próstata y de huesos, optó por ir andando los 20 kilómetros del trayecto. El 5 de diciembre de 2020, llegó a pedirle a Nuestra Señora de Guadalupe que acabara con la pandemia y que le diera a él la gracia de promover el rezo del Rosario.
Francisco ha participado en 20 ocasiones de esta romería desde sus inicios en 1993. En el año 2020, su experiencia fue completamente diferente: «Tuve la gran alegría de caminar», dice. Durante su caminata, rezó el Rosario, entonó cánticos a la Virgen y sintió la presencia espiritual de las miles de personas que habían caminado a su lado en años anteriores.
Francisco tiene una gran fe en Dios y en Nuestra Señora de Guadalupe, de quien ha recibido grandes gracias. Por ejemplo, su recuperación de un grave accidente laboral en el que se rompió el cráneo. En el momento del accidente, su fe ya era fuerte y se ha acrecentado desde entonces. Heredó la fe de su madre, una mexicana muy fervorosa.
Francisco recomienda a cuantos conoce y encuentra que confíen en la Virgen. «Quiero decirles a todos que la Virgen intercede por nosotros. Como una madre, nunca olvida a sus hijos», dice.
Adaptado de un artículo de Lorena Rojas, diciembre 2020, publicado en Catholic San Francisco