Desde junio de 1981, en Medjugorje (Bosnia-Herzegovina), en una Yugoslavia comunista a punto de implosionar, seis niños afirman haber visto a una señora en la colina de Podbordo, cerca de su casa. A esta primera aparición silenciosa seguirán un gran número de citas con el Cielo.
En los primeros años, el diálogo es diario y los niños transmiten regularmente lo que se les dice. Luego, desde el 1 de marzo de 1984 hasta el 8 de enero de 1987 inclusive, los mensajes son semanales y están destinados, primero a los habitantes del pueblo, y luego a todo el mundo. Finalmente, desde el 25 de enero de 1987 hasta hoy (finales de 2018), los mensajes mensuales se reciben el día 25 de cada mes. ¡Su número es por tanto excepcional!
El mensaje es ante todo alguien: la Virgen María, Madre del Redentor, Madre nuestra, a quien los videntes llaman la Gospa (Nuestra Señora en lengua croata). El título con el cual se presenta es el de “Reina de la Paz”. Este nombre revela un aspecto de su identidad, como Madre del Príncipe de la Paz, y su intención: "Queridos hijos, los invito a la paz, para que la vivan en sus corazones y alrededor de ustedes, para que todos conozcan esta paz que no viene de ustedes, sino de Dios. (…) Es por esta paz que he venido como Madre y Reina de la Paz” (Mensaje del 25 de diciembre de 1988).
La Virgen María viene a educarnos en la paz y la reconciliación, enseñándonos a volver a Jesucristo que nos da la paz (…). Después de una visita pastoral de varios meses, el obispo Höser fue nombrado por el Papa, el 31 de mayo de 2018, como visitador apostólico de la parroquia de Medjugorje, por tiempo indefinido. Si bien Monseñor Höser no tiene la misión de estudiar el fenómeno de las apariciones y, por tanto, de pronunciarse sobre el tema, sin embargo, está a cargo del cuidado pastoral de los habitantes de este pueblo, así como de los peregrinos cuyo número se estima en 2.5 millones cada año.
El juicio de la Iglesia, por tanto, aún no ha sido establecido definitivamente.
Padre Alexis Wiehe
ver también: medjugorje-lappel-de-la-reine-de-la-paix