Pontmain es un pequeño pueblo francés donde, en 1871, mientras el ejército prusiano invadía Francia, la Virgen se apareció a unos niños con un mensaje de oración y arrepentimiento. El hecho tuvo lugar pocos días antes del armisticio y la salida de las tropas prusianas.
Béchouate es un pequeño pueblo libanés donde la Virgen María se manifestó en 2004 a través de signos y curaciones. El hecho tuvo lugar muy poco antes de la retirada pacífica de las tropas de ocupación sirias. Además de esta similitud de circunstancias históricas, Nuestra Señora de Béchouate es una estatua de la Virgen de Pontmain.
Por eso se ha concretado oficialmente el vínculo entre las dos manifestaciones sobrenaturales: el rector del santuario de Pontmain, el padre Claude Poussier, viajó al Líbano en enero de 2005 para meditar en la capilla de Béchouate. El mensaje entregado por la Virgen en 1871 en Pontmain fue traducido al árabe e inscrito en una larga pancarta colocada a la entrada del santuario de Béchouate en el Líbano: “Oren, hijos míos, Dios les corresponderá pronto. Mi Hijo les escuchará”.
Cf. Emma Aubin-Boltanski CNRS, Centro de Estudios Interdisciplinairios del Hecho Religioso. “La Vierge, les chrétiens, les musulmans et la nation Liban” (La Virgen, los cristianos, los musulmanes y la nación libanesa), 2004-2007, en la revista Terrain, núm. 51 2008/2.
Síntesis de Françoise Breynaert