Une Minute avec Marie
Faire connaître et aimer Marie
En una entrevista con la televisión italiana, el director técnico de la selección italiana de futbol, la Squadra Azzurra (equipo azul), Roberto Mancini, da testimonio del lugar tan importante que la Virgen María ha ocupado en su vida. Ella es la roca en la que apoya su vida como hombre y entrenador de fútbol.
Asegura, “soy un creyente, un católico practicante. Crecí teniendo un oratorio* cerca de casa, tuve mucha suerte”. Roberto Mancini, elegante y sonriente, entrenador talentoso, además de contar con una brillante carrera como jugador profesional, es un hombre de fe. A sus 56 años, consiguió ganar la Eurocopa, haciendo un torneo perfecto: ganó los tres partidos de la fase de grupos y, obviamente, los restantes de la fase eliminatoria. ¿Y si su éxito se debiera a la gran confianza que deposita en Dios? Entrevistado por Mons. Darío Viganò, exprefecto de la Secretaría de Comunicación del Vaticano y ahora responsable del programa religioso de la RAI, el canal de la televisión pública italiana, el coach de la Squadra Azzurra aceptó evocar extensamente su fe en Dios y, en particular, su devoción a la Virgen María: "La Santísima Virgen es Madre de todos, siempre está cerca de nosotros", subrayó.
También contó una anécdota de su vida de fe, que se remonta al día de su primera comunión. “Ese día mi equipo jugaba al mismo tiempo que tenia lugar la Misa de primera comunión y el sacerdote celebró la Misa más temprano. Gracias a él, pude hacer mi primera comunión y luego unirme a mi equipo para el segundo tiempo. ¡Marqué dos goles!”, recuerda en tono divertido.
*No se refiere a un lugar para orar, sino a una especie de club deportivo-cultural-catequético que tienen las parroquias en Italia