Une Minute avec Marie
Faire connaître et aimer Marie
Con motivo de la festividad de la Visitación, el 31 de mayo de 2017, y la conclusión del "mes de María" en los jardines del Vaticano, las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, que sirven a la Casa Santa Marta del Vaticano, ofrecieron a los participantes una "medalla milagrosa" cuyo diseño fue indicado por la propia Virgen María a santa Catalina Labouré, el 27 de noviembre de 1830, en París, en el convento de la calle del Bac.
Los "milagros" que siguieron a las primeras distribuciones de la medalla le valieron su nombre popular; pero, como lo indica el reverso de la medalla a través de los dos Corazones de Jesús y María, lo que es milagroso es el amor sobrenatural del cual la medalla es testimonio.
De hecho, es tradición que el mes de María termine en el Vaticano con una procesión de antorchas a la "Gruta de Lourdes" en los Jardines del Vaticano y el rezo del Rosario.
La superiora de las Hijas de la Caridad, la hermana Stefanía Monti, explicó a los micrófonos de Radio Vaticana el gesto de las hermanas: "Dar esta medalla milagrosa a los participantes de esta peregrinación, al final del mes de María, es revalorizar este gran regalo que la Virgen María hizo a Catalina Labouré y a toda la comunidad. Es un signo de la gran ternura de Dios para con toda la humanidad”.
En cuanto al servicio de las hermanas en la Casa Santa Marta, la hermana Stefanía enfatizó: "Es un servicio especial, un servicio que vivimos en el corazón de la Iglesia, con el Vicario de Cristo, el papa Francisco”.