Los gemelos Mónica y Cristian Moya, nacidos en enero de 1974 en Casablanca, Chile, supieron recientemente que cuando eran bebés, su madre los había consagrado a la Virgen María para salvarlos. Actualmente, él es sacerdote, ella religiosa. Esta es su historia:
Sor Mónica hizo su profesión perpetua en la Congregación de las Hijas de Santa María de la Providencia, en Chile en 2017, y su hermano gemelo es también sacerdote en el Santuario de Nuestra Señora Purísima de Lo Vásquez.
Descubrieron que cuando tenían tres meses su madre los había consagrado a la Virgen María ya que estaban en el hospital en estado crítico. Teniendo una profunda devoción a Nuestra Señora Purísima de Lo Vásquez, la madre de los gemelos ofreció la vida de sus bebés a la Virgen María. “Poco después de ese ofrecimiento, nos curamos” cuenta Sor Mónica. ”
Para celebrar su votos perpetuos, sor Mónica deseó que su hermano gemelo celebrara la misa y la ceremonia generalmente presididas por el obispo. La congregación aceptó la solicitud de la religiosa. Su hermano pertenece a la parroquia que su madre frecuentaba cuando los gemelos se enfermaron: el Santuario de Nuestra Señora Purísima de Lo Vásquez, ahí donde su madre suplicó a la Virgen María por la salud de sus gemelos.