En el relato de la Anunciación, vemos cómo la Virgen María da la bienvenida a la Misericordia de Dios, que la llevará a salir de sí misma y hacia nuevos caminos.
Este texto es para mí como el modelo de toda oración: muestra la importancia de la disponibilidad de cada uno de nosotros para que nuestro corazón y todo nuestro ser estén listos a acoger a Dios cuando irrumpa en nuestras vidas.
Al ver cómo se desarrolla este asombroso encuentro entre María y el arcángel Gabriel, comprendemos mejor lo que es la oración. Lo más bello es ver cómo la Virgen recibe las palabras que Dios le ha dirigido a través del Ángel. Así la oímos exclamar: "He aquí la esclava del Señor. Hágase en mí según tu palabra". (V. 38)
Incluso sin comprender lo que se le pide y todo lo que va a suceder, Maria se declara completamente dócil a la Palabra. Se trata a la vez de una palabra y de una acción – ella da la bienvenida a un niño en su vientre – y a que una promesa se haga realidad. La maravilla de la Misericordia de Dios obrando en nuestras vidas!
Cardinal Philippe Barbarin
Encuentro islamo-cristiano en Jamhour (Líbano)
LYON, 11 avril 2015 (Zenit.org)