San Alfonso de Ligorio es el autor de la obra « Las Glorias de María », aparecida en 1750, best-seller total (mil ediciones parciales de las cuales 16 en Italia, cuando él todavía vivía). En ella evoca la figura de la Virgen: espiritualidad, oraciones de santos y devociones populares. Termina cada capítulo con un "ejemplo" edificante: generalmente el relato de una aparición o de un milagro; unos cuarenta en total. Busca poner de manifiesto el papel de la Virgen dentro de la Iglesia y entre los fieles, sin una crítica histórica de los hechos relatados. El 31 de julio de 1787, hacia las seis de la tarde, durante su agonía, Alfonso sostenía entre sus manos una imagen de la Virgen, (conservada hasta hoy día donde los Redentoristas, N° 170 del Bulevard Montparnasse, distrito XIV, en París). « De pronto se le vio un rostro resplandeciente y hablándole en voz muy baja a Nuestra Señora mientras sonreía. Una hora más tarde, frente a otros tres padres el mismo "encuentro" se reprodujo».