Sor Faustina Kowalska* relata en su Diario una veintena de apariciones de la Virgen, además de una treintena de visiones de Cristo, ángeles y difuntos.
El 25 de marzo de 1936: «De repente vi a la Madre de Dios que me dijo: 'Le he dado al mundo al Salvador. Debes hablar al mundo de su misericordia y prepararlo para la segunda venida de aquel que vendrá, no como un misericordioso Salvador, sino como Juez Justo (...). No temas nada, sé fiel hasta el fin» (Diario, 295).
O unos meses después: «La vi tan hermosa que me faltan palabras para describir su belleza, ni siquiera en parte. Era toda blanca, estaba rodeada por un pañuelo azul, la capa también azul y una corona en la cabeza. De toda su persona irradiaba una luz indescriptible. “Soy la Reina del cielo y de la tierra, pero sobre todo vuestra Madre”.
Ella me abrazó contra su corazón y dijo: “Tengo compasión de ti”» (Diario, 295).
Extractos: F. Breynaert: Enciclopedia Mariana
* Sor Faustina Kowalska, polaca, canonizada por el papa san Juan Pablo II en el año 2000.