16 de febrero – Abisinia: Nuestra Señora del Pacto de Misericordia

María nos libra de una visión catastrofista

«Las incertidumbres del presente, las dudas sobre el futuro, no solo del planeta, sino también de la humanidad, por las tensiones geopolíticas y las fracturas sociales dentro de las propias naciones..., nos hacen temer lo peor. La Iglesia no se salva de este severo diagnóstico. Y aunque el escándalo provocado por algunos de sus miembros y de sus líderes, nuestros propios pecados y nuestras traiciones, puedan corromperla y resquebrajarla, no olvidemos nunca que nuestra confianza en la Iglesia se basa ante todo en la fidelidad de Dios hacia ella. Compuesta por pecadores, la Esposa de Cristo es santa, con la santidad misma de Dios, solo por la gracia de Dios que llama a sus miembros, sin cesar y cada vez más, a la conversión.

María nos libra de una visión catastrofista. Por muy bajo que caigamos, su ayuda maternal nunca nos fallará. Ella es la mujer que, en el libro del Apocalipsis, en medio de la agitación y el tumulto del universo, aplasta la cabeza de la serpiente. Dios la ha puesto al frente de la historia humana, y ella acompaña, Madre amantísima, nuestro camino caótico hacia la patria del Cielo. Confiemos en ella. ¡Que su belleza inmaculada brille e ilumine nuestro camino hacia la luz incandescente y eterna que es Cristo en la gloria!

Mientras el abatimiento y el desánimo nos hacen dudar de los demás y de nosotros mismos, la Iglesia, la "niña Esperanza", de la que habló Charles Péguy y personificada por la Virgen, abre una salida de emergencia. Poniéndonos humildemente, como ella, bajo la mirada de Dios, sabemos que el Señor nunca nos abandonará; que todo le es posible al que cree; y, aunque caigamos, con su perdón, Dios nos levanta. Por muy bajo que caigamos, solo caeremos en Dios, en su infinita misericordia. Solo la esperanza llega al final de nuestras dudas y caídas.

La Virgen María, "la Señora hermosa", significa esperar contra toda desesperanza».

Mons. Dominique Rey, obispo de Fréjus-Toulon: extracto de su homilía del 8 de diciembre de 2022. Santuario de Nuestra Señora de las Gracias en Cotignac.

www.france-catholique.fr

 

Suscribirse es fácil (y también darse de baja).
No lo dudes: suscríbete hoy. ¡Es gratuito!