Francia se está reconfigurando parcialmente. Pero la vida sigue. Su fuente es el Corazón de Jesús, del que brotan tantas gracias de amor y reconciliación para quienes se abren a estos dones. Octubre fue el mes del Rosario, hermosa oración que dirigimos a la Virgen María, Madre del Salvador Jesucristo. ¿Por qué no retomar el Rosario y meditar en los misterios de la vida de Jesús?
El domingo 1 de noviembre contemplamos la vida de los santos, esos hermanos y hermanas que conformaron su vida según el Evangelio. Ellos amaron y encontraron fuerza en Dios para entregarse, educar, cuidar, acompañar y bendecir. Estas personas son nuestros modelos a seguir. Su vida puede inspirarnos ánimo, amor, renovación. Ellos nos muestran el camino del gozo en Dios.
El lunes 2 de noviembre es la festividad de los Fieles Difuntos, día de oración por nuestros difuntos. Todos estamos preocupados. Nuestra esperanza es que su muerte no signifique su desaparición definitiva, sino un nuevo camino hacia la eternidad feliz con Dios. Además, la Iglesia insta a que sus pecados sean perdonados, a que sus faltas no les sean contadas y a que se acojan a la Divina Misericordia para ser liberados y entrar en la gloria del Cielo. Celebramos misas por ellos, la oración por excelencia, porque, a través del sacrificio eucarístico, Jesús ofrece su vida al Padre para salvarnos.
+ Monseñor Philippe Christory, obispo de Chartres, 27 de agosto de 2021.
https://www.diocese-chartres.com/la-toussaint-fete-de-tous-les-saints-qui-nous-precedent/