En 1966, el año milenario del bautismo de Polonia, fue pronunciado por el Primado de Polonia el acto de entrega total a la Madre de Dios. Este evento se celebró en Jasna Gora, santuario situado en Częstochowa (Polonia), el 3 de mayo, fecha de la festividad de María, Reina de Polonia.
Durante su primer viaje a Polonia, en 1979, el papa Juan Pablo II declaró: "Deseo de manera particular confirmar en este santuario de Jasna Gora, en mi tierra natal Polonia, los actos de consagración y confianza que, en varios momentos, muchas veces y en diversas formas, fueron pronunciados por el Cardenal Primado y por el episcopado polaco.
De manera muy especial, deseo confirmar y renovar el acto de consagración pronunciado en Jasna Gora el 3 de mayo de 1966 con motivo del milenio de Polonia. Con este acto, los obispos polacos, al entregarse a ti, Madre de Dios y a tu maternal servidumbre de amor, querían contribuir a la gran causa de la libertad de la Iglesia" (Juan Pablo II, homilía en Jasna Gora, 4 de junio de 1979).
El segundo viaje del Papa a Polonia tuvo lugar en las circunstancias particularmente dramáticas del año 1983. El Papa presentó el santuario de Jasna Gora como "la Caná de Galilea polaca" y exclamó: “¡Madre! ¡Habla con tu Hijo! ¡Cuéntale a tu Hijo cuán difíciles son estos días! (Juan Pablo II, homilía en Jasna Gora, 19 de junio de 1983). Luego el Papa habló sobre la advocación de Jasna Gora. Esta es la oración repetida muchas veces por los polacos: "María, Reina de Polonia, estoy muy cerca de ti, te recuerdo, estoy velando”.
Equipo de Marie de Nazareth