El 7 de diciembre de 1920, la Santísima Virgen María se apareció de madrugada a sor Josefa Menéndez1 y le dijo:
Hija mía, nunca temas al sufrimiento ni al sacrificio, así están hechos los caminos de Dios. Si quieres salir victoriosa del embate del enemigo, te recomiendo dos cosas: primero, reconoce que no eres nada y no mereces nada (...). Todo es gracia de tu Dios; en segundo lugar, cuando te encuentres abandonada, rodeada de tentaciones; cuando tu alma esté fría y sin fuerzas para luchar, nunca abandones la oración. Ora con humildad y confianza, y abre inmediatamente tu corazón a quien mi Hijo te ha dado como Madre aquí abajo. Créeme, hija mía, así no te equivocarás. Recibe mi bendición. Sabes muy bien que soy tu Madre.
1 Sor Josefa Menéndez, nacida en España (1890-1923), era religiosa coadjutora de la Sociedad del Sagrado Corazón de Jesús. Es autora del famoso libro Una llamada al amor en el que transmitió, por orden del mismo Jesús, los múltiples mensajes de este que la llama su mensajera. A veces también la Virgen María visito a Josefa durante su difícil misión para brindarle su apoyo.
Extracto de: Un appel à l’Amour, le message de Jésus au monde et sa messagère Sor Josefa Menéndez (Una llamada al amor, el mensaje de Jesús al mundo y a su mensajera Sor Josefa Menéndez).