En 1036, el gran príncipe Yaroslav Valdimiraovich el Sabio (alrededor de 978-1054, hijo de san Vladimir el Grande) derrotó a los nómadas pechenegos que atacaron las tierras de Kiev Rus (ahora Ucrania). Por gratitud a Dios y a su Santísima Madre, construyó la magnífica Catedral de Santa Sofía en Kiev, que todavía existe, y erigió la Iglesia de la Anunciación sobre la Puerta de Oro de la ciudad.
En 1037, en la misma iglesia de la Anunciación, Yaroslav el Sabio puso a toda la nación bajo la protección de la Madre de Dios. Por tanto, por voluntad de este monarca cristiano, la Rusia de Kiev fue una de las primeras naciones cristianas en ser consagrada oficialmente por su gobernante a la protección y patrocinio de la Santísima Theotokos, María siempre Virgen1.
La Virgen Orante (en ucraniano “Оранта”, del latín "en oración") es una famosa representación de la Madre de Dios en oración, con los brazos extendidos. Se encuentra en la Catedral de Santa Sofía en Kiev, Ucrania. El icono está expuesto en la catedral desde su fundación por Yaroslav el Sabio.
La imagen es considerada uno de los símbolos religiosos más importantes de Ucrania, como un escudo que defiende a los habitantes del país. Antes se le llamaba el "muro indestructible" o "muro inmutable". La leyenda dice que, mientras la Theotokos extienda sus brazos en oración sobre Kiev, la ciudad seguirá siendo indestructible.
Según la creencia popular, el pañuelo bordado que rodea la cintura de la Madre de Dios, sirve para enjugar las lágrimas de los que vienen a rezar y a presentarle sus problemas y preocupaciones2.
1 Extracto de A Byzantine Rite Liturgical Year de Julian Katrij, 1983. pág. 229: La festividad del Pokrov (patrocinio) de la Santísima Théotokos.
2 Oranta
Texto de Hieromonk Teodosy (Kraychuk), lector ucraniano de Un Minuto con María, agosto de 2019.