“Jesús es la flor que florece en el tronco de Jesé: si quieres recoger esta flor bendita, dobla con tus oraciones la rama de la que está prendida, y busca a Jesús Eucaristía en el seno virginal de María", dice san Buenaventura, OFM (1217 a 1274).
Todas las gracias creadas que encierra el Sacramento de la Eucaristía están en poder de María; pero eso es poco. En la santa hostia está el mismo autor de la gracia, Jesús, el Dios infinito e inmortal.
¡María tiene sobre Jesús en la Eucaristía un poder soberano, un poder de madre! Ella da, también dispensa la gracia increada y eso es lo que la constituye en Señora, la Señora del Santísimo Sacramento. María es la tesorera de Jesucristo; es a Él mismo a quien ella posee, a Él mismo a quien nos da.