Cada año, la asociación Rosario de los Niños, creada en Francia , publica una imagen y una oración por la novena de la Inmaculada Concepción, teniendo en cuenta las orientaciones dadas por el Santo Padre a la Iglesia. Publicada hoy en 400,000 copias, esta oración se reza en todo el mundo de habla francesa.
Existe de hecho, un fuerte vínculo entre la historia espiritual de Francia y el dogma de la Inmaculada Concepción. (...) Sin embargo, antes de que el dogma de la Inmaculada Concepción fuera solemnemente proclamado, los teólogos de la Universidad de París en la Edad Media eran juramentados en la iglesia de San. Severino, de no hablar en contra de la Inmaculada.
Pero es, sobre todo, con las grandes apariciones marianas en el siglo XIX, en la rue du Bac en 1830 y luego en Lourdes en 1858, que la Virgen imprime a Francia un nuevo impulso de devoción a Dios a través de la contemplación de su Inmaculada Concepción.
Muchas conversiones han sido y son aún obtenidas gracias a la medalla milagrosa y su invocación: "Oh María, concebida sin pecado, ruega por nosotros que recurrimos a ti." Alfonso Ratisbona, sólo por haber aceptado llevar la medalla que detestaba, vio abrirse el cielo en la iglesia de San Andrea delle Fratte en Roma, y a la Virgen, como en la medalla, venir hacia él en silencio...
Bernadette Soubirous, sin educación, de una familia excesivamente pobre, escuchó de la boca de la "Belle Dame" la designación que por sí misma convenció al sacerdote Peyramale sobre la autenticidad de las apariciones y de su mensaje.
Don Guillaume Chevallier
Padre, capellán del Chapelet des enfants