El 28 de enero de 1840, la Santísima Virgen le apareció a una novicia de la Hijas de la Caridad que hacía su primer retiro espiritual en la Casa Madre, 140 rue du Bac, en Paris (Francia). La joven hermana Justina Bisqueyburu, estaba en oración en una sala de la capilla (…) De pronto, la Santísima Virgen le apareció (…).
Tenía en la mano derecha su corazón rodeado de llamas, en la otra mano, un escapulario de tela verde. En una de las caras del escapulario estaba la imagen de María y, en la otra, un corazón encendido de rayos más brillantes que el sol y transparentes como de cristal. Este corazón atravesado por una espada, estaba rodeado de una inscripción en forma oval, coronado por una cruz en oro y que decía: “Corazón Inmaculado de María, ruega por nosotros ahora y en la hora de nuestra muerte”.
Ese mismo día una voz interior revela a Sor Justina el significado de esta visión. Entonces comprendió que este nuevo escapulario contribuiría a la conversión de los que no tienen fe, y sobre todo les procuraría una buena muerte. (…). El Padre Aladel que fue confidente de Santa Catalina Labouré, se convirtió en el confidente de Sor Justina.
La confección del escapulario, fue retardada varias veces, de lo cual la Santísima Virgen se quejó varias veces a la hermana, en diferentes apariciones entre 1840 y 1846. Pero cuando se comenzaron a distribuir los escapularios, las conversiones y las curaciones se multiplicaron; desde entonces, el Escapulario Verde ofrece siempre una multitud de gracias.
Capilla Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa, 140 rue du Bac, 75340 Paris Cedex 07, France, Cum Permissu Superiorum Paris, 1978