Si el nombre de Paul Kim Tae-won no le dice nada, es porque usted no es un joven coreano. Estrella del pop-rock, su canal de YouTube rebasa los 5 millones de visiones, pero él tiene otra actividad menos popular, que lo ocupa desde hace diez años, lleva perlas de Filipinas a su esposa, Pauline Lee Hyunioo.
Con las perlas su mujer fabrica 15 rosarios diarios desde hace diez años. Una “producción hogareña” vendidos a los seguidores de la pareja de estrellas que entregan los beneficios a instituciones que acompañan a personas que sufren de deficiencias mentales. Las dos celebridades tuvieron un hijo autista.
Estos rosarios han sido para Pauline Lee Hyunioo, un “camino de curación”, ella misma lo asegura y cuenta: “Me sentía herida cuando otras personas juzgaban a mi hijo minusválido. Empecé a repartir los rosarios que fabricaba a mis vecinos” El trabajo paciente y repetitivo se transformó poco a poco en oración: “Hice esos rosarios con la esperanza, en el corazón, de que la gracia de Dios sería acordada al futuro propietario ya que la gracia de Dios no tiene fin”.