La Virgen María se mantiene de pie, portadora de esperanzas, para todos aquellas y aquellos que comparten la cruz de su Hijo.
Rafael a los 6 años tiene una enfermedad congénita que le conduce a la muerte. En el momento de darle las buenas noches a sus padres inquietos de dejarlo solo, él les explica:
“Todas las noches la Virgen Maria viene a verme. Yo me siento muy bien con ella. -¿Y esta noche ella está aquí contigo?
Ah, no, en este momento está visitando a todos los que sufren, hace un largo viaje. Después, vendrá a verme a mi cama.”
Padre Nicolas Buttet
Tomado de la revista: Famille Chrétienne, du 27 mai au 2 juin 2017 (Familia Cristiana)