Tenía 15 años, estaba en el Seminario del Sagrado Corazón de Jesús en Corupa (Brasil) y había llegado a la conclusión de que no tenía vocación sacerdotal. Me decía ¿qué pretensión la mía la de creer que Dios me llame a mí antes que a cualquier otro en el mundo? Concluí que era mejor regresar a mi casa.
Como nuestro retiro de seminaristas debía durar todavía tres días me dije: ¿por qué no disfrutar hasta el final?, esto me ayudará a atravesar esta etapa importante de mi vida.
Así fue como pasé una gran parte del retiro delante de la imagen del Corazón Inmaculado de María, pidiéndole su protección materna, una vez que hubiese dejado el seminario. Todo mi retiro estuvo envuelto en una gran paz y ¡olvidé completamente mi decisión de salir del seminario!
No lo recordé sino después de varias semanas, pero me sentía tan bien, tan tranquilo con respecto a mi vocación sacerdotal y religiosa que comprendí que mi lugar era ahí. Nunca más tuve dudas de mi vocación.
Monseñor Murilo Krieger
Vicepresidente de la conferencia de los obispos de Brasil y Primado de Brasil
Entrevista exclusiva para un Minuto con María
Entrevista de Thácio Siqueira