María, sois toda belleza, sois toda sin mancha. ¡Cuán bella, cuán dulce en delicias ha sido vuestra inmaculada concepción! ¡Venid, venid desde el Líbano, venid y seréis coronada! Avanzad como aurora rutilante Aportad la alegría de la salvación Por vos ha surgido el Cristo Dios, Sol de Justicia, Puerta de la luz, Como los lirios entre las espinas Entre las doncellas vos sois la virgen bendita Vuestro vestido blanco brilla como la nieve, Vuestro rostro es como el sol, ¡Jardín cerrado, fuente sellada, Madre de Dios y paraíso de la gracia! La lluvia ha cesado y desaparecido, El invierno ya se marchó y las flores han vuelto a florecer Sobre nuestra tierra una voz se deja escuchar Voz dulce, voz de tórtola, voz de paloma. Tomad vuestro vuelo, paloma de belleza sin par. ¡Levantaos, daos prisa y venid!