Los electro-oculogramas realizados a los mismos videntes acusan resultados sorprendentes: los electrodos colocados al lado de los ojos permiten seguir los movimientos, voluntarios o involuntarios del globo ocular. El estudio hecho simultáneamente a los dos jóvenes (María e Iván), las diferentes frecuencias propias al estado de vigilia (incluso cuando se fija la atención en algo) se detienen casi simultáneamente al inicio del éxtasis, y recomienzan cuando este termina. Tal resultado pone de relieve una fijación de la mirada más fuerte que la misma voluntad. Los jóvenes se arrodillan, a menudo al mismo tiempo, según el estudio metódico hecho por la Sra. Joyeux, bajo la dirección del Profesor Henri Joyeux. La sincronía se produce a veces a una centésima de segundo, lo que contribuye a excluir toda posibilidad de una señal exterior. Ellos pronuncian al mismo tiempo la tercera palabra del Padre Nuestro “que estás en los cielos” la cual recitan juntos hasta el final. Se les pregunta: ¿por qué no decís las dos primeras palabras: “Padre Nuestro” y responden: « porque la Virgen comienza y nosotros la seguimos» Así, todo parece confirmar que una causa exterior desencadena las diferentes fases del éxtasis sin ninguna explicación neurológica o psicológica. El estudio realizado en Medjugorie constituyem sin duda, algo inédito en materia médica sobre el éxtasis. La neurología se detiene ante los hechos inexplicables.