Muy pronto habrá hombres y mujeres que quieran imitar su género de vida y su ardorosa devoción a la madre de Dios, la Virgen del Carmen. De ahí nació la devoción al escapulario del Carmen; como señal de pertenencia a su Orden y de su protección maternal. Por el año 1452, comienzan a organizarse los monasterios de las monjas carmelitas del claustro. Pero también se forman grupos o cofradías seglares, que viven el espíritu del Carmelo su estado seglar, permaneciendo con sus familias. En uno de esos monasterios de monjas, llamado “La Encarnación” de Ávila (España), entrará la que luego sería santa Teresa de Jesús. La Orden de Carmelitas Descalzos es una Orden dentro de la Iglesia Católica Romana fundada por Santa Teresa de Ávila; cuyo enorme trabajo de reforma comenzó por ella misma.